Huesca pertenece a la comunidad autónoma de Aragón y se presenta como una de las cunas de los pueblos más bonitos de España. Su increíble naturaleza esta bañada por los ríos Isuela y el Flumen y contiene una de las sierras más bellas del país conocida como la Puerta de los Pirineos. Sus pueblos más destacados y más bonitos sean quizás estos:
1. Ansó
Ansó es una villa de carácter tradicional, donde las casas están esculpidas en piedra y el exuberante entorno natural que las rodea enamora. Pásate por el Centro de Interpretación, ya que allí se da a conocer la riqueza natural de la zona de los Pirineos, hablando desde la importancia de la conservación del oso hasta de los numerosos parques naturales de los alrededores. Mantienen una sala de exposición durante todo el año.
Ibón de Estanés también es un gran lugar donde poder admirar un lago natural. De camino a él debes pasar por Aguas Tuertas, uno de los valles más famosos de Ansó, por la forma natural de sus meandros que recuerdan a zigzags o suaves ondulaciones.
Casa Morené es uno de los espacios arquitectónicos más curiosos de Ansó, ya que representa la arquitectura tradicional del pueblo, en piedra y madera con tejas planas color tierra. Este tipo de hogares todavía hoy conservan las cuadras con pesebres, los patios o “soleros” y las cocinas de leña. Ahora se utiliza como sala cultural y lugar de actividades sociales.
La Iglesia de San Pedro de Ansó, destaca por su planta de cruz latina, así como por el campanario y la crucería estrellada. El retablo de estilo barroco que alberga en el interior es uno de los más asombrosos de Huesca, junto a las pinturas clásicas que evocan las imágenes sagradas de los Santos.
2. Jaca
Es uno de los pueblos favoritos para aquellos que les gusta practicar deportes de nieve en invierno (posee cerca dos estaciones de esquí, la de Candanchú y la de Astún), aunque también guarda rincones especiales dignos de ver, como la Catedral románica de España más sorprendente (la Catedral de San Pedro de Jaca), el Castillo de Jaca y el Museo de Miniaturas Militares también son otras de las paradas que hay que hacer si se quiere disfrutar de las maravillas de este pueblo.
El Palacio Episcopal también es un edificio digno de ver, con una galería de balcones muy interesante y la sección de retratos episcopales.
Foto: Hugo RC
3. Torla
Torla es un pueblo que linda con Francia, ubicado en la montaña. Su iglesia (Iglesia de San Salvador) es uno de los principales puntos de visita, así como la Plaza Mayor Medieval, la casa señorial de Viu, la Casa Ruba, la Casa Brun y la Casa Lardiés. Además cerca tienes la pista forestal que te lleva hacia Bujaruelo. Su encanto reside en que todos sus edificios conservan la majestuosidad de la época medieval, pudiendo palpar las historias y encanto de aquellos tiempos.
Foto: Ch3micals
4. Aínsa
En Aínsa te encuentras con un entorno medieval, cuyos monumentos y construcciones se han declarado como Monumento Histórico-Artístico. Su castillo amurallado, así como la iglesia parroquial y la plaza mayor de Aínsa, se declaran los puntos de visita más encantadores. ¡En la plaza mayor todavía se conservan las prensas antiguas de vino que se utilizaban en la vendimia para elaborar mosto fresco!
Desde el castillo, en su cumbre, puedes admirar la belleza de las montañas del Pirineo. Una zona ideal para ver el amanecer o el atardecer. Tampoco te pierdas la colegiata de Santa María así como la cruz cubierta, un templete situado a un kilómetro y medio del castillo.
Foto: A salto de mata
5. Benasque
Es un punto de encuentro para ver los picos más altos de Pirineo, así mismo uno de los pueblos más ricos en vegetación, en donde nacen los ríos y cada rincón te sorprende con iglesias románicas y casonas tradicionales.
No te pierdas el Palacio de los Condes de Ribagorza, de estilo renacentista y arcos de medio punto con imponentes escudos, la “Casa Faure” (casas tradicionales con patio y torre ubicada al sur) o la Torre de Los Infanzones (una construcción destinada como defensa) También tienen un balneario denominado como Baños de Benasque, situado en el interior del valle, en una zona pura apta para la relajación y la salud. Además de cuidarte puedes contratar tu ruta de senderismo o alguna excursión.
Foto: Miguel García Estecha
6. Anciles
Se encuentra a un kilómetro de Benasque, por lo que puedes recorrer los dos pueblos a la vez, allí puedes admirar un pueblo de costumbre y muy bello, en donde se conservan las casas solariegas del siglo XVII como la Casa Suprián y la Casa Barrau. Visita su capilla ya que su torre es asombrosa. Puedes tomar un aperitivo en los restaurantes de comida casera como “Ansils”.
Foto: Arsenio Díaz
7. Riglos
Si vas a Riglos, ve hasta los “Mallos” unas asombrosas formaciones geológicas de un tono rojizo que alcanzan hasta los 200 y 300 metros de altura. También puedes contratar actividades de escalada (para los más atrevidos) y admirar la iglesia parroquial de Nuestra Señora del Mallo. Si quieres conocer todo acerca de las aves, acércate hasta el Centro de Interpretación de las Rapaces Arcaz.
Foto: Tochis
8. Loarre
El monumento más importante de Loarre es su castillo abadía, el cual forma parte del conjunto histórico-artístico del país con su muralla y los torreones. La bóveda del castillo impresiona por sus pinturas murales de carácter barroco. La iglesia parroquial es una buena manera de admirar otra construcción clásica, a la vez que el Ayuntamiento y la Fuente de los Tres Caños de Loarre.
Foto: Víctor Sancho
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